Una vieja leyenda contada en las calles sagüeras“ (Fuente original: Don Francisco Canto y Nores, poeta
y escritor sagüero).
Cuenta la vieja leyenda que en una ocasión un grupo de piratas arribaron a las lomas del Mogote después de descargar un bergantín repleto de oro para enterrarlo en
sus amplias cuevas.Cuando todo el botín había sido sepultado regresaron
por el monte hacia su embarcación pero de pronto se dieron cuenta que faltaba
el Segundo de a bordo y comenzaron su búsqueda pensando que este se había
extraviado.El Capitán,hombre muy listo acostumbrado a las traiciones, comprendió al instante que su Segundo se había ausentado con el objetivo de apoderarse del tesoro oculto por lo que dió la orden a diez de sus hombres bien armados para que lo buscaran por todos los rincones
de Jumagua y lo ajusticiaran en cuanto lo encontraran, pero de pronto se
vieron rodeados por una banda de bandoleros que comenzaron a disparar y
les dieron un fuerte combate haciendo que los pocos piratas que se salvaron
salieran en desbandadas no sin antes darse cuenta que el Segundo desaparecido
era el jefe de los bandoleros el cual se había escondido para más tarde apoderarse del gran tesoro que consistía en onzas,medias onzas y doblones,otros opinan que se extravió,encontrándose con los bandoleros a los cuales para salvar su vida les pidió que lo acompañaran y se repartirían el oro entre todos,pero lo que resultó fue que el Segundo continuó largo tiempo
con la pandilla y con mucha astucia logró apoderarse de la fortuna y comprar
un bergantín para continuar en la piratería”.
Aunque este relato en particular no fuera más que pura fantasía popular,muchos acontecimientos idénticos pudieron haber ocurrido en la época de la piratería teniendo en cuenta
que la zona de Sagua La Grande constituyó el punto más estratégico de la
costa norte por donde debían pasar obligatoriamente las flotas de tesoros
del Nuevo Mundo con rumbo a España.Su abundancayería se convertía en una
auténtica trampa para los galeones españoles y luego el caudaloso río les
servía a los filibusteros para internarse en tierra y buscar más facilmente las cuevas del Mogote “donde sepultar los
tesoros y enterrar los cadáveres de sus pobres víctimas”.
Se sabe por tradición oral que existía un camino carretero desde el río (en la zona del actual
Barrio de Cocosolo) y las lomas del Mogote en los primeros tiempos de la conquista y desde allí “partían los productos
hacia Villaclara”,por esos tiempos a Sagua se le conocía por el nombre de “El Embarcadero” pues se le consideraba
una especie de puerto interior y es muy conocido por la historia los cuarteles generales que tenían algunos temibles piratas
del caribe en la cayería de Sabana-Camagüey como el del Olonés (Juan David Nau) en Cayo Francés y el cayo de la Yana,cerca
de La Panchita que fue residencia del temible Henry Morgan.